Thanksgiving, o Día de Acción de Gracias, no era una fecha que solía estar entre las que celebraba usualmente. En Argentina, mi país natal, no se acostumbraba, y en Panamá, mi segundo hogar donde viví 10 años, sólo se celebraba en algunas familias. Pero desde que vivo en Estados Unidos, esta fecha se tornó en algo especial.
Más allá del hecho de celebrar junto con las personas que se han convertido en mi familia, y otras amistades que se van sumando a nuestra vida, es el hecho de aprender a estar agradecido. Convertir la gratitud en un hábito es algo que a veces damos por sentado.
Es cierto que algunas veces puedo ser un poco crítico con los avances en temas de inclusión y diversidad, en especial en Latinoamérica. La ansiedad de ver un mundo más equitativo donde todas, todos y todes pueden gozar de los mismos derechos muchas veces se apodera de mí. Marcos legales truncos, leyes pendientes de ser aprobadas, personas trans sin trabajo formal, adolescentes en la calle por haber salido del clóset, la culpa de sentirnos fuera de la heteronormatividad, en fin, falta de aceptación de la comunidad LGBTQ+. Son solo algunos ejemplos de esa ansiedad.
Pero en este momento de reflexión, decidí cambiar mi forma de pensar y ver el mundo. Es un momento de sentirnos agradecides de tener una comunidad de la que somos parte. Y por eso, quiero compartirles 5 situaciones de las que me siento totalmente feliz de ser un profesional gay fuera del clóset.
1. It takes a village, people
Hoy agradezco ser parte de una comunidad que es mucho más grande que yo. Tenemos una historia compartida, de luchas, éxitos, amor, tropiezos, frustraciones y llantos. Una historia de aprendizaje constante, de romper los moldes obsoletos de género y las tradiciones patriarcales. Pero lo que sobresale de estos años es la resiliencia que hemos desarrollado en cada rincón del mundo. Hoy nuestras marchas no son individuales, son por cada uno de los colectivos que componen la comunidad LGBTQ+. No podemos dejar de agradecer a todas esas personas que han luchado por nuestros derechos, a esas organizaciones que buscan recursos constantemente para ganar derechos sociales, y recordar que no podemos dejar de hacer política hasta que todes logremos los mismos derechos.
2. El orgullo de conectar (Let´s Pride Connect)
Hoy agradezco por las amistades que he entablado desde que comencé con el activismo. Aún recuerdo allá por 2015 cuando me crucé con esas personas que estaban iniciando con Convive Panamá y empezamos a desarrollar el área de diversidad empresarial en un país que, si bien al día de hoy no cuenta con ningún derecho pro LGBTQ, ha logrado fomentar una comunidad que marcha sin miedos todos los años en las principales calles de la ciudad. Quién iba a pensar que ese evento llevaría a fundar Pride Connection, expandir la red a más de 40 empresas y entablar lazos con otros Pride y Cámaras Diversas en Latinoamérica, USA, y Europa. En este viaje he conocido gente increíble que busca seguir fortaleciendo los lazos para visibilizar a las personas LGBTQ+.
3. El privilegio de tener derechos
Hoy agradezco por los derechos conquistados. Sé que aun queda un largo camino por recorrer en temas de reconocimiento de las disidencias en todo el continente. Pero tomemos un minuto para pensar en todo lo que cada país ha avanzado en los derechos sociales. Algunos pueden ser que ya hayan aprobado el matrimonio igualitario, la adopción homoparental, el cupo trans, o leyes de identidad de género. Otros quizás solo tengan la despenalización de la sodomía, o la penalización de la discriminación por motivos de orientación sexual o identidad de género. Sé que estoy escribiendo desde un lugar de privilegio de un hombre cis blanco gay casado. Sé que dar gracias por algo que todo el mundo debería gozar es conformarse con poco, es simplista y hasta pudiera ser juzgado de poco empático. Intento cada día poner esos privilegios en acción a favor de aquellas personas que aún no los tienen. El punto aquí es simplemente agradecer a todas esas personas que desde su activismo social y político han logrado los avances de los que todes deberíamos gozar.
4. La fuerza de la diversidad unida
Hoy agradezco porque poco a poco estamos eliminando las etiquetas. Durante el último año, cada vez hace más fuerza el tema de la interseccionalidad de las empresas. Generalmente, solemos enfocar los esfuerzos de inclusión en las diferentes aristas de los talentos diversos: edad, género, orientación sexual, identidad de género, habilidades funcionales, entre otras. Hoy estoy viendo cada vez más el foco en trabajar la inclusión desde las interseccionalides, es decir, que lo que define a una persona es la interacción entre dos o más factores sociales. Cuestiones de la identidad como la orientación, género, la etnia, la raza, la ubicación geográfica, o incluso la edad no afectan a una persona de forma separada.
Un ejemplo sencillo sería, ¿cuál ERG[1] le correspondería a una mujer lesbiana afrodescendiente? O ¿cuál sería el ERG indicado para un hombre trans refugiado? Muchas veces en las empresas se tiene que “escoger” un ERG del que ser parte, pero qué pasa cuando tenemos esos casos. Incluso suele pasar que falta comunicación entre los diferentes grupos y se pierde la fuerza de trabajar la diversidad como un todo. Me gusta ver que esto está cambiando de a poco, y sé que pronto eliminaremos las etiquetas.
5. Mi viaje personal
Finalmente, hoy agradezco por el aprendizaje de estos años y mi transformación personal. Hace unos 7 años atrás recuerdo que uno de mis objetivos era poder “hacer algo por la comunidad”, y trabajar en temas de activismo LGBTQ+. Quería ver como despegaba de a poco de mi carrera como contador. Esa visión me llevó a ir realizando pequeñas acciones, que me han llevado a esta carrera de Coach de Diversidad. Hizo que casi sin querer queriendo publicara mi primer libro “Come Out! Las empresas también tienen que salir del clóset”, que cada día surjan nuevas charlas y proyectos relacionados, y que siga conociendo gente estupenda y corajosa en el camino. Gracias a todas esas personas que van dejando un poco de ellas en mi vida.
Gracias a ti por leer hasta acá! Gracias por dedicarme estos minutos. Happy Thanksgiving!
[1] ERG – Employee Resource Group o Grupo de Recursos de Empleados. Buscan proporcionar apoyo, mejorar el desarrollo profesional y contribuir al desarrollo personal en el entorno de trabajo. Tradicionalmente se centraban en rasgos de personalidad o características de grupos subrepresentados, pero se están expandiendo a grupos "basados en intereses".